La luna aguarda París

No hay razón más grande que el deseo de estar contigo

Prometamos que ningún día será como el anterior, vivamos sobre un colchón, con las sábanas a manera de refugio, que necesito esconderme en tu pecho, para sentirme viva, dejemos que el frío nos arranque escalofríos, permitamos que la lluvia nos moje la cara, que algo me dice que las noches son lentas, que la luna es intensa, que aún me erizas la piel, vamos no me hagas continuar que sabes, no se me da la censura…